En medio de la catástrofe climática que azota a Bahía Blanca, un nombre destaca entre los cientos de rescatistas: Maxi De Miguel, oriundo de Magdalena y miembro de la Policía Bonaerense y de Bomberos Magdalena se encuentra en el lugar. Su labor al igual que todos los esfuerzos de los rescatistas ha sido clave en la asistencia a los damnificados y su imagen ayudando a un menor afectado por el desastre fue captada por el Ministerio de Seguridad de la Provincia y se viralizó rápidamente.
De Miguel, quien también forma parte de los Bomberos Voluntarios de Magdalena, se ha sumado a las tareas de rescate en una de las tragedias más devastadoras de los últimos tiempos.
En pocas horas, la ciudad de Bahía Blanca sufrió la caída de 350 milímetros de agua, provocando inundaciones y dejando 13 fallecidos, más de 1.000 evacuados y 100 desaparecidos. Barrios enteros quedaron incomunicados y la Ruta Nacional 3 fue interrumpida por un socavón a la altura del kilómetro 692.
El temporal arrasó con puentes y redes eléctricas. Desde EDES informaron que la energía se restituye de manera paulatina, priorizando hospitales y centros de evacuación. Por su parte, ABSA trabaja para recuperar el abastecimiento de agua, aunque las estaciones de bombeo operan con grupos electrógenos y no alcanzan a cubrir la demanda.
En un contexto de desesperación, el trabajo de rescatistas como Maxi De Miguel es un faro de esperanza. Su entrega y compromiso reflejan el espíritu solidario de quienes están en la primera línea del rescate.